Los Novios Eternos

 

Hoy quiero dedicar unas palabras a un incomprendido colectivo: las parejas sin hijos.

Las parejas sin hijos, envidiadas por muchos, han de hacer frente a determinados infiernos: ser novios eternos.

 

A priori eso parece una salvación más que un problema, pero pasados unos años la cosa no es fácil. Mantener esa pasión primera y adolescente cuesta. A no ser que tengas mucho tiempo, un entrenador personal y dinero (dado que eso siempre ayuda para todo).

Cuando tienes hijos la cosa cambia. Los escasos momentos a solas son oasis de emoción. Además, temas ya no te van a faltar, ni pasos que seguir, aunque sea para discutir (con la consiguiente reconciliación). Y si eres religioso entonces ya es súper fácil: del bautizo a la comunión, y si se encarta hasta la confirmación.

 

Otra confirmación: las parejas sin hijos que deciden no casarse son el colmo del punk. ¿Seguir juntos únicamente por propia voluntad? ¿Sin ritual? ¿Un noviazgo a pelo es un Purgatorio total? ¡Con la de tema y entretenimiento que da una boda!

Para los desconocedores del tema, que las parejas no casadas sin hijos sigan abocadas a explorar hasta la saciedad restaurantes, rincones vacacionales e incluso fiestas rebosantes de modernez semejaría la Dolce Vita. Sin embargo son deportes claramente de riesgo para la identidad.

 

Puede sucederte incluso como a nosotros, que acudimos hace poco a una soirée estupenda y descubrimos, pese a todos nuestros colorinchis y abalorios, que sobrepasábamos en casi veinte años la media de la concurrencia.

Tras un gin tónic no pude evitar preguntarle a una chica simpatiquísima y estilosísima (algo así como la Lou Dillon local) que vestía orgullosa una camiseta de “Beverly Hills 90210 – Sensación de Vivir” si aquella prenda la lucía como antigualla vintage, pues yo había sido testigo de su primera emisión. Os ahorraré la respuesta. Afortunadamente, como la actitud lo es todo, tras el impacto ahora somos amigos de instagram.

 

Aun así curiosamente el fotógrafo oficial nos cortó la cabeza en la fotogalería del evento. ¿Es eso la muerte por guillotina virtual?

Aunque para cenizos virtuales el que le sucedió a una de las Musas.

Ella, que también tiene una relación punk (no hijos, no boda) montó un fin de semana parejil en Cadaqués lleno de actividades estimulantes, ideal para revitalizar cualquier relación. Paseos, excursiones, hotel con vistas, restaurantes románticos y hasta ruta en kayak para acceder a calas recónditas y secretas.

 

Tomaron los remos, avanzaron entre delfines, arribaron a un rincón salvaje, hermoso e inaccesible de la costa (Brava). La pasión les inundó. Todo era de película. En un momento dado, incluso pareció que del cielo llovían flores. ¡Un momento, sí que caían claveles! ¡Claveles y algo más!

¿Ceniza? Miraron arriba. Un grupo de gente estaba despidiéndose por última vez de un ser querido lanzando sus cenizas al mar. Quedaron cubiertos. Por suerte la urna no les dio en la cabeza. Vieron el cielo abierto y llegaron sanos y salvos a puerto.

 

Llegar a puerto, quizá ésa es la clave en cualquier relación. O situación.

Disfrutad mucho, sea cual sea vuestra situación y… ¡Sed muy Felices!

 

¡Nos vemos en Instagram !

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